Pero antes, les he de confesar, mis hambrientos lectores, que YA PROBÉ COMIDA MEXICANA ACA!!! Y la verdad que está muuuuy buena! Digo, lo que sí es que está carísimo, pero valió la pena. Tampoco no es para ir a comer todos los días, porque entonces sí me quedo homeless, pero de vez en cuando no es mala idea ir. Después de perderme, ¡lo encontré!
Después de ir al restaurante mexicano, que me regreso en el camión y estaban una chava y un chavo platicando. De repente, la mujer le dio un papel y el chavo se le quedó viendo. Al voltear a ver [como mi buen sentido periodístico me dictó jajaja] vi que era una notificación de posesión de sustancias ilegales. De repente iban discutiendo, y la chava en cuestión le dijo que era un pendejete. El wey se enojó y se fue al otro lado del autobús.
Por lo que escuché [aparte de que navegué con bandera de pendejo, obviamente] pude deducir que la policía cachó al wey con sustancias ilegales y que se tenía que reportar a algún lado, pero tiró el papel y la mujer lo encontró y se lo devolvió [o algo así].
De verdad que es muy interesante escuchar las conversaciones de los demás y hacerse wey. Creo que esto de ser un journalist va a ser muuuuy interesante.
Reporteando,
Lalo.
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