Carta a Manuela...

Querida Manuela,

Hoy por alguna razón te recordé. ¿Por qué? No sé. Supongo que siempre te tengo en mente, pero hoy es distinto.

Aquellos días donde decías "Ya saqué las cobijas... ¿quién las pondrá el siguiente año?" ya no son lo mismo sin tí. Aquellos días donde jugábamos lotería y confundías el venado con un caballo y las risas que nos hiciste sacar ya no existen. Los momentos en los que querías que toda tu familia se reuniera para platicar... ya son menos frecuentes. Los instantes que nos regalaste, ahora sólo son un recuerdo muy bonito.

Siempre trabajadora y sonriente, pero a la vez seria, nos enseñaste muchas cosas a todos los que te conocimos. Tu fortaleza y entereza nos hace pensar si algún día llegaremos a tener alguna de las cualidades que tu tienes.

Sin embargo, tienes la fortuna de poder ver a todos tus hijos y nietos desde donde te encuentres. Tristemente te das cuenta que una de tus hijas (inclusive lo viste cuando estabas aquí) está sola y sin cariño alguno de quienes durante mucho tiempo le ofrecieron ayuda: sus hermanas y hermano. Pero también te das cuenta que todos tenemos una lección que te aprendimos: a ser fuertes en la vida, ya que no es nada fácil. A luchar por un sueño u objetivo que nos pongamos para que la recompensa sea muy buena. A que la única manera de tener cerca a los que quieres es con amor, cariño, comprensión. También nos mostraste que la disciplina y el respeto es básico.

Van a pasar 7 años desde que, por circunstancias de la vida, te fuiste a un mejor lugar. Tú tienes la dicha de conocer tal lugar que nosotros ni siquiera nos podemos imaginar. También estás con el amor de tu vida que por mucho tiempo estuviste apoyándolo en todo lo que hacía por tí y por tus hijos.

Por eso, hoy 1 de diciembre, este post va dedicado a tí. Gracias por tantas enseñanzas, risas, cariño, amor. Todos tus hijos y nietos lo agradecemos mucho.

Siempre te recordaré y siempre tendré en mente cuando llegábamos y me decías "¡Hola Güero!" y por todos esos momentos sabrosos que tengo de tí. Gracias por dejarnos un legado muy importante y que ahora muchos de tus hijos lo tienen.

Que Dios te bendiga abue, tú que estás cerca de Él.

Eduardo.